91.- LAS LETANÍAS LAURETANAS

Letanía, estructura y tipos

La palabra letanía procede del griego y significa oración o súplica. La RAE la define como “rogativa o súplica que se hace a Dios con cierto orden, invocando a la Santísima Trinidad y poniendo por mediadores a Jesucristo, la Virgen y los Santos.” (1)

La estructura general de las letanías consta de dos partes: una serie de breves invocaciones o súplicas hechas por el monitor o el sacerdote que preside y la respuesta repetitiva de la asamblea.

Las letanías utilizadas a lo largo de la historia de la Iglesia, se pueden agrupar en dos clases: De súplica y de invocación:

A) Letanías de súplica, en las que, en ambas partes, tiene prioridad la petición. Ejemplos:

En la “Oración de los fieles”, que se hace en la Misa:

Por el Papa, los obispos y los sacerdotes,

roguemos al Señor........................................Te rogamos, óyenos.

Etc.

En la letanía de los Santos:

De todo mal...................................Líbranos, Señor.

De todo pecado............................ Líbranos, Señor.

Etc.

B) Letanías de invocación, en las que en su primera parte predomina la invocación o alabanza y la segunda parte es una petición. Ejemplos:

Madre de Cristo..............................Ruega por nosotros.

Madre de la divina Gracia..............Ruega por nosotros.

Etc.

La mayor parte de las letanías pertenecen a la clase de invocación o alabanza; pero, en alguna coexisten ambos tipos.

Letanías en el Antiguo Testamento

Ponen de manifiesto la fe del pueblo de Israel en la grandeza y bondad de Yavé y en la necesidad de alabarle o pedir su perdón.

Ejemplos: Salmo 135:

Dad gracias al Señor porque es bueno .... porque es eterna su misericordia

Dad gracias al Dios de los dioses............ porque es eterna su misericordia.

Etc.

En Daniel 3,58 y sgtes.:

Ángeles del Señor................................. Bendecid al Señor.

Cielos.................................................... Bendecid al Señor.

Aguas todas.......................................... Bendecid al Señor..

Letanías en la liturgia oriental

Es de destacar la “plegaria diaconal”, así llamada porque el diácono enuncia la petición y el pueblo contesta Señor, ten piedad (Kyrie, eleison). Las peticiones se extienden a todas ls necesidades.

Ejemplo de la liturgia bizantina:

Ten piedad de nosotros, oh Dios, según tu gran

misericordia, te rogamos, óyenos..................................... Señor, ten piedad.

Ejemplo de la liturgia caldea:

Oh Padre de misericordia y Dios de todo consuelo......... Señor, ten piedad.

Por la paz, la concordia, la estabilidad del mundo

entero en todas las Iglesias............................................... Señor, ten piedad.

Como fácilmente se observa, es grande el parecido con la “Oración de los fieles” de las Misas católicas occidentales.

Letanías en la liturgia occidental

La Iglesia occidental desarrolla, en la liturgia desde finales del siglo IV la llamada “Oración de los fieles”, traduce los textos litánicos de la liturgia oriental, los revisa y mejora para adaptarlos a las nuevas circunstancias.

A partir del siglo VII se reduce paulatinamente la “Oración de los fieles” hasta llegar a desaparecer en las misas ordinarias. Será restablecida por el Concilio Vaticano II en la Constitución sobre la Sagrada Liturgia, nº 53.

Las Letanías de los Santos

Cuando, a partir del siglo VII, la Iglesia latina deja de utilizar la Oración de los fieles, llena el vacío con unas oraciones independientes unas de otras y las agrupa en torno a tres elementos: las invocaciones a Cristo, las alabanzas a los santos y las peticiones.

Las “Letanías de los Santos” han realizado un largo itinerario: parten de Roma a finales del siglo VII, llegan a las Islas Británicas e Irlanda con gran aceptación, en el siglo VIII pasan a las Galias y países germánicos, donde siguen desarrollándose y, en el siglo XI, vuelven a Roma muy enriquecidas.

Las Letanías de los Santos son de carácter popular y en su versatilidad acogen la sensibilidad religiosa de cada lugar. Cada región, catedral o abadía tenía sus propias letanías.

Se usaban en las procesiones penitenciales, en la vigilia pascual, en las ordenaciones, en las oraciones por los enfermos, en las rogativas y en las fiestas religiosas.

LAS LETANÍAS DE LA VIRGEN

Las letanías marianas se multiplicaron en los siglos XV y XVI. En el santuario de Loreto surgió toda una serie de letanías, tantas que existía una para cada día de la semana. En 1601, el Papa Clemente VIII prohibió todas las letanías existentes, excepto las incluidas en el Misal, en el Breviario y las del santuario de Loreto, conocidas como Lauretanas.

En algunos monasterios se cantaba el Oficio de la Virgen Santísima, con diversas variaciones, según la Orden religiosa. El Papa Pío V estableció el Oficio Parvo de la Virgen y abolió las variaciones monásticas.

Estructura actual de las Letanías lauretanas

1.- Empiezan con cinco súplicas que enuncia el monitor y repite la asamblea:

Señor, ten piedad.

Cristo, ten piedad.

Señor, ten piedad.

Cristo, óyenos.

Cristo, escúchanos.

2.- Siguen cuatro invocaciones:

Dios, Padre celestial...............................................ten piedad de nosotros.

Dios, Hijo, Redentor del mundo..............................ten piedad de nosotros.

Dios, Espíritu Santo................................................ten piedad de nosotros.

Santísima Trinidad, un solo Dios.............................ten piedad de nosotros.

3.- Las letanías continúan con las invocaciones a María. Al principio, en el siglo III, era única: Santa María.................. ruega por nosotros.

Posteriormente se añadieron otras dos, completando los tres modos de invocar a María: 

Santa Madre de Dios............................... ruega por nosotros.

Santa Virgen de las vírgenes ...................ruega por nosotros.

4.- Con el tiempo, las reflexiones teológicas, los elogios de los teólogos y los títulos añadidos por algunos Papas (2) conformaron 13 invocaciones al título de Madre:

Madre de Cristo................................ruega por nosotros.

Madre de la Iglesia............................ruega por nosotros.

Madre de la divina gracia..................ruega por nosotros.

Madre purísima.................................ruega por nosotros.

Madre castísima................................ruega por nosotros.

Madre inmaculada.............................ruega por nosotros.

Madre amable....................................ruega por nosotros.

Madre admirable................................ruega por nosotros.

Madre del buen consejo.....................ruega por nosotros.

Madre del Creador.............................ruega por nosotros.

Madre del Salvador........................... ruega por nosotros.

Madre de misericordia........................ruega por nosotros.

6 al título de Virgen:

Virgen prudentísima...........................ruega por nosotros.

Virgen digna de veneración................ruega por nosotros.

Virgen digna de alabanza...................ruega por nosotros.

Virgen poderosa..................................ruega por nosotros.

Virgen clemente..................................ruega por nosotros.

Virgen fiel............................................ruega por nosotros.

17 a títulos diversos: 

Espejo de justicia................................ruega por nosotros.

Trono de la Sabiduría..........................ruega por nosotros.

Causa de nuestra alegría....................ruega por nosotros.

Vaso espiritual.....................................ruega por nosotros.

Vaso digno de alabanza......................ruega por nosotros.

Vaso insigne de devoción....................ruega por nosotros.

Rosa mística........................................ruega por nosotros.

Torre de David......................................ruega por nosotros.

Torre de marfil......................................ruega por nosotros.

Casa de oro..........................................ruega por nosotros.

Arca de la alianza.................................ruega por nosotros.

Puerta del cielo.....................................ruega por nosotros.

Estrella de la mañana...........................ruega por nosotros.

Salud de la enfermos............................ruega por nosotros.

Refugio de los pecadores.....................ruega por nosotros.

Consoladora de los afligidos.................ruega por nosotros.

Auxilio de los cristianos.........................ruega por nosotros.

y 13 al título de Reina:

Reina de los Ángeles............................ruega por nosotros.

Reina de los Patriarcas.........................ruega por nosotros.

Reina de los Profetas............................ruega por nosotros.

Reina de los Apóstoles..........................ruega por nosotros.

Reina de los Mártires.............................ruega por nosotros.

Reina de los Confesores.......................ruega por nosotros.

Reina de las Vírgenes...........................ruega por nosotros.

Reina de todos los Santos.....................ruega por nosotros.

Reina concebida sin pecado original.....ruega por nosotros.

Reina asunta al cielo.............................ruega por nosotros.

Reina del Santísimo Rosario.................ruega por nosotros.

Reina de la familia.................................ruega por nosotros.

Reina de la paz......................................ruega por nosotros.

5.- Termina la Letanía Lauretana con 3 invocaciones: 

Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo... perdónanos, Señor.

Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo... escúchanos, Señor.

Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo..ten misericordia de nosotros.

 

Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios... para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Cristo.

ORACIÓN: Te rogamos nos concedas, Señor Dios nuestro, gozar de continua salud de alma y cuerpo y, por la gloriosa intercesión de la bienaventurada siempre virgen María, vernos libres de las tristezas de la vida presente y disfrutar de las alegrías eternas. Por Cristo nuestro Señor. Amén

(1) RAE, Diccionario de la Lengua Española. Madrid 1992.

(2) Pío V, por la batalla de Lepanto contra los turcos: Auxio de los cristianos.

Clemente VIII, a petición del rey Felipe II: Madre inmaculada.

Pío IX: Reina concebida sin pecado original.

León XIII: Reina del Santísimo Rosario y Madre del Buen Consejo.

Benedicto XV: Reina de la paz.

Pío XII: Reina asunta al cielo.

Pablo VI: Madre de la Iglesia.

Juan Pablo II: Reina de la familia.