Ntra. Sra. de Coromoto |
Guanare
Es
la capital del Estado Portuguesa. Fue fundada, el 3 de noviembre de
1591, por el Capitán Juan Fernández de León. Está emplazada en la
divisoria de los ríos Guanare y Portuguesa, el sector económico
dominante es el agrícola por lo que se la conoce también como
“Capital agrícola de Venezuela” y “
El granero de Venezuela”.
Guanare
es, sobre todo, la “capital espiritual de
Venezuela” porque en ella se venera a Nuestra Señora de
Coromoto, cuya historia me propongo relatar.
Historia
de Ntra. Sra. de Coromoto
De
todos es sabido que la colonización de América implicaba, en el
campo religioso, la conversión de los indios a la religión
católica, misión en la que pusieron gran empeño tanto los reyes
como las autoridades religiosas de la península ibérica, enviando
sucesivas remesas de misioneros de diversas órdenes religiosas.
Tras
las fundación de Guanare en 1591, los indios Cospes que habitaban la
región huyeron a la selva, hacia el río Tucupido, no muy lejos de
Guanare. Ambos grupos se mantuvieron aislados durante 60 años y en
un práctico respeto mutuo. El cacique de los Cospes se negaba a
convertirse al catolicismo porque aseguraba que la religión católica
era un pretexto de los españoles para quedarse con sus tierras.
Primera
aparición
En
la mañana del 8 de septiembre del año 1651, Coromoto, cacique de
los Cospes y su esposa contemplaron algo extraordinario en la
quebrada del río Tucupido: Sobre las corriente de las aguas, una
hermosa señora, con un niño en brazos, los estaba mirando y les
sonreía amablemente. Al poco dijo al cacique: “Sal
del bosque con los tuyos y ve donde los blancos para que reciban el
aguas sobre la cabeza y puedan entrar en el cielo”.
Es
fácil entender que Coromoto quedó muy impresionado y decidió
cumplir lo dicho por la señora. Marchó con todos los suyos a
Guanare para ser instruido en la religión cristiana, se asentaron en
unos terrenos cedidos por el Capitán Juan Sánchez, que distaban
unas cinco leguas de Guanare. El Capitán informó a las autoridades
de Guanare y éstas le nombraron encomendero de los indios.
Los
indios Cospes cultivaron las tierras y recibieron el bautismo,
excepto el cacique que, como estaba acostumbrado a las selva, le fue
imposible adaptarse a la nueva situación y amenazó con volverse a
su aldea de la selva.
Segunda
aparición
La
señora se vuelve a aparecer, rodeada de un aura luminosa, el 8 de
septiembre de 1652, esta vez en modesta choza del cacique. Estaban
presentes Coromoto, su esposa, su cuñada Isabel y su sobrino Juan.
Según confesó Isabel, del cuerpo de la señora se desprenden
potentes rayos de luz, “como los rayos del
sol cuando está en el mediodía”, pero que no deslumbran la
vista.
El
cacique, lejos de conmoverse, amenazó a la señora y, cuando intentó
atraparla, ella desapareció de su vista, dejando en la mano de
Coromoto una pequeña estampa con su imagen impresa. El niño Juan
avisó a Juan Sánchez de todo lo sucedido, y éste, rápidamente
llamó a dos compañeros y, juntos, se trasladaron a la aldea del
cacique y, al ver la imagen de la estampa, reconocieron a la Virgen
María con el Niño Jesús. Recogieron la estampa y dieron parte a
las auroridades.
Al
día siguiente, 9 de septiembre, el cacique se puso en camino para
regresar a la selva, pero fue mordido por una serpiente y, viéndose
en peligro de muerte, se arrepintió y pidió ser bautizado. Recibido
el sacramento, se le puso el nombre de Ángel Custodio y recomendó a
los suyos que se bautizasen. Los indios Cospes formaron una
comunidad cristiana muy fervorosa, en la que, años más tarde,
falleció Angel Custodio.
La
estampa de la Virgen de Coromoto
Mide
27 x 22 centímetros. La Virgen está sentada en un trono cuyo
respaldo está formado por dos columnas unidas por un arco, el Niño
Jesús está en el regazo de su madre. La Virgen cubre sus hombros
con un manto carmesí y un velo blanco sobre sus cabellos.
Juan
Sánchez colocó la estampa en un pequeño altar en su casa, y fue
muy venerada por todos los pobladores de la región hasta febrero del
año 1654, cuando el Vicario Diego de Lozano ordenó que fuese
llevada al templo de Guanare.
El
Santuario
En
el lugar de la segunda aparición fue construido el Santuario
Nacional Nuestra Señora de Coromoto, declarado Basílica por Pío
XII el 24 de mayo de 1949, consagrado el 7 de enero de 1996 e
inaugurado solemnemente por San Juan Pablo II el 10 de febrero del
mismo año.
Devoción
a la Virgen de Coromoto
En
Venezuela: Todos los años,
el día de la fiesta se produce en Guanare una gran concentración de
fieles para venerar a su Patrona.
La
Virgen de Coromoto fue declarada Patrona de Venezuela el 1 de mayo de
1942 por los obispos venezolanos. El 7 de octubre de 1944, el Papa
Pío XII la declaró “Celeste y Principal
Patrona de toda la República de Venezuela” siendo coronada
canónicamente el 11 de septiembre de 1952.
El
10 de febrero de 1996, el Papa Juan Pablo II manifestó su alegría
por volver a la “tierra de gracia” e
invitó a “revitalizar la fe, amar a la
Iglesia y a la Humanidad con el mismo amor de Cristo”.
En
España: Como expresión de la hermosa interrelación del
pueblo canario y el venezolano, en diversas pastes de las islas
canarias hay réplicas de la imagen de Ntra. Sra. de Coromoto.
Isla
de Tenerife: En San Cristóbal de La Laguna está la ermita de
Nuestra Señora de Coromoto, situada en el barrio Coromoto. En
Candelaria hay na réplica en la iglesia de Santa Ana. En La Guancha,
otra réplica en la ermita del barrio La Guancha de Abajo.
Isla
de Hierro: En el municipio de La Frontera existe una réplica
en la iglesia.
En
Madrid, en la iglesia San Antonio de Padua de la calle Bravo
Murillo, hay un altar dedicado a la Virgen de Coromoto.
En
México: Existen réplicas de la Virgen de
Coromoto: En la iglesia de San Miguel Arcángel de la ciudad de
Villahermosa, en la iglesia de San Juan Bautista de Coyoacán y en la
parroquia Sees Sapientiae de Huixquilucan.
En
Argentina se venera a la Virgen de Coromoto en el barrio
de Once, uno de los más populosos de la capital federal.
En
Chile se venera a la Virgen de Coromoto en la Parroquia
Latinoamericana.
Una
súplica
Dadas
la especialísimas circunstancias de Venezuela en este año 2016,
unido a todos los peregrinos a Guanare, siento la imperiosa necesidad
de pedir a Nuestra Señora de Coromoto que interceda ante su Hijo
Jesús por la paz y las concordia de ese hermoso país llamado
Venezuela. ¡Ojalá logren vivir en paz y armonía!
No hay comentarios:
Publicar un comentario